Elige tu Ikigai

Ikigai es un término japonés, que pasado a nuestro lenguaje significa algo así como «la razón de vivir», algo tan concreto y complejo como eso. Los nipones lo utilizan para hablar sobre el motivo principal, el más importante, el objetivo último que tienes en la vida.

Creen que todos tenemos uno.

«Ser feliz», podrías pensar. Seguro que sí, quieres ser feliz, como todos, pero para entender qué hay detrás realmente de eso hay que hacerse algunas preguntas, un poco más complicadas.

¿A quién le estás regalando tu tiempo todos los días? ¿Por qué te compraste una casa? ¿Para qué vives en una ciudad? ¿Qué miedos tienes? ¿Qué rencores? ¿Cuáles son tus frustraciones? ¿Sobre cuántas cosas te resignas cada semana?

A cada respuesta, pregúntate cómo influye eso en tu objetivo de «ser feliz».

Más allá de esto, del «ser feliz», debe haber un Ikigai. Debes tener un Ikigai. Y debes pensar en cuál es el tuyo. Sobre todo porque eso te puede ayudar a conocerte más, y a abrir los ojos sobre muchas cosas.

Yo aún no he encontrado mi Ikigai; pero estoy en ello.

Esto tiene que ver con tus prioridades, tu estilo de vida, tus principios, tu forma de pensar y tu manera de responder ante los estímulos.

Hay bastante literatura sobre todo esto (por lo visto, la referencia es «Ikigai», de Sebastian Marshall), pero personalmente creo que la clave está en repetirse, una y otra vez, la misma pregunta:

¿Por qué?

Una de estas cada vez que vayas a hacer algo, y te replantearás muchas cosas.

Bonus. En esta charla se apunta a que el Ikigai es una de las razones por las que los habitantes de Okinawa son tan longevos.